Pero, ¿Qué tal si te atreves a hacerlo con la herida abierta e irrigando sangre? Creo que sería algo parecido a esto:

Te inyectas la solución equivocada
Para así poder dormir con tu dolor, de noche
Y yo, en mi cama
Pego los ojos al techo
Mientras demonios por debajo
Se burlan, susurran y esconden.
Desdibujé de tu rostro una sonrisa
Para cambiarlo por un formato en escala de grises
Pero es que no pude soportar la idea
Del sentirte cerca y saberte lejos
Muy lejos.
Llámame cobarde
Loca, autoflagelante e incoherente
Pero el quererte tanto, me ha hecho daño
Porque en ti encontré
Al hombre que nunca jamás, como Peter Pan
Me soñé.
Por no ser nada de lo que buscaba
Por ser más de lo que esperaba
Estoy parada en la salida torpe
Sabiendo que no querías irte
Y yo sin saber como sentirme.
Con contradicciones
Estoy en el límite de mis limitaciones
bordeando mi ser en una aurora ambivalente
De colores pobres
En algunos casos ausentes
Más ausentes que la conexión de mi corazón con la mente.
Entre llantos y sollozos
Tragos amargos y chistes flojos
Llegará la calma
Anhelada
En donde mi aurora y tal vez la tuya
Choquen en el cielo
Formando un panorama psicodélico y perfecto
De despedida o regreso.
Ilustración: "Noche estrellada" de Vincet Van Gohg